domingo, 28 de junio de 2020

AGRADECER

Si consideras cada día todo por lo que podés dar GRACIAS, ¡¡Saldría una lista muy extensa!!! …
Podrías pensar que hay días que no ocurre nada especial, pero SIEMPRE hay razones para estar agradecido.
¿Por qué no hacer el hábito de valorar y agradecer lo que tenemos?
Por ejemplo, podés dar las gracias por estar vivo, por despertar cada día, porque salió el sol y pudiste disfrutar de su calorcito aunque sea un rato.
Porque te llamó un amigo para preguntar cómo estás, qué es de tu vida; porque tenés un amigo que escucha tus penas, un amigo que te abraza, que llora con vos, que ríe y comparte su vida contigo…
También dar las gracias por un familiar que viajó a verte, porque eres importante para él,
Dar gracias porque tenés un trabajo, porque tenés fuerza para resolver un problema que se te plantea.
Porque tenés un auto que te transportó este día de frío al trabajo, a la casa de un amigo, o porque llegó el colectivo justo cuando estabas llegando a la parada…
Agradecer a tu familia, a tu padre/madre/espos@/novi@ que te ayudó a hacer el almuerzo, la cena, que tomó mates con vos…
Dar gracias por esa persona que se cruzó en tu vida por un ratito y que te ayudó en algo, con sus palabras, con su gesto, con su tiempo….
Agradecer por la gente amable con la que te encontrás día a día.
Dar gracias porque este día frío tenés algo en la mesa, aunque sea un té caliente o una sopa.
Agradecer por las personas que se interesaron por vos, por tu salud, por tu alegría, porque comparten tus momentos, desde medios personales o virtuales.
Agradecer por esa situación de dolor o de error que te permitió hacer algo nuevo que no conocías.
Si… agradecer tus días y cada experiencia vivida, verás que la Vida comienza a ser más luminosa y resplandeciente…
… y Gracias por leerme… me hacés feliz… - Elsa Huamán
En Ti está Todo 💙💛💗
Espiritualidad y Consciencia


miércoles, 29 de enero de 2020

Constelaciones Familiares en Consulta Individual


CONSTELACIONES FAMILIARES EN CONSULTA INDIVIDUAL

La Constelación Familiar está basada en los Órdenes del Amor de Bert Hellinger. Es una metodología sistémica que, a partir de una situación limitante que trae quien consulta,  es posible observar la relación entre esos conflictos  actuales y las formas relacionales establecidas a partir de sucesos ocurridos en la familia de origen o en un contexto social. Explora las dinámicas inconscientes del Sistema Familiar, las “ataduras invisibles” que actúan más allá del nivel biográfico.

El motivo de la consulta puedes ser problemas de origen familiar como relación entre padres e hijos, hermanos, pareja, traumas, enfermedades, la relación con el dinero y la abundancia, la carrera profesional o desafíos personales que se repiten constantemente a lo largo de la vida y a los que nos tenemos que enfrentar. 

La Constelación Familiar posibilita la visualización de la imagen del “desorden que enferma” e impulsa un movimiento sanador en el alma/espíritu hacia una “imagen que sana”. A través de este trabajo es posible observar qué lugar se estaba ocupando en el sistema familiar y recuperar el propio, el que verdaderamente corresponde. Esto significa reestablecer el orden y el equilibrio interno, iniciando un camino que da  fuerza a la persona para  tomar las riendas de su vida y reconectar con sus propios recursos, dejando de ser víctima para pasar a ser actor responsable, mirando la realidad tal cual es, encontrando nuevas y mejores maneras de amar y estar, desplegando  su potencial para vivir con mayor plenitud.

Facilita: Prof. Elsa Huamán

Sobre Elsa Huamán, haz clic aquí 

En Ti está Todo 💙❤💛
Espiritualidad y Consciencia
Informes y Turnos 264 6733744 - 264 4168717






Yo soy tu síntoma


OJALÁ LO LEAS HASTA EL FINAL…  



“Hola, tengo muchos nombres: dolor de rodilla, grano, dolor de estómago, reumatismo, asma, mucosidad, gripe, dolor de espalda, ciática, cáncer, depresión, migraña, tos, dolor de garganta, insuficiencia renal, diabetes, hemorroides, y la lista sigue y sigue. Me he ofrecido como voluntario para el peor trabajo posible: ser el portador de noticias poco gratas para ti.

Tú no me comprendes, nadie me comprende. Tú piensas que quiero fastidiarte, echar a perder tus planes de vida, todos piensan que quiero entorpecerles, hacerles daño o limitarles. Y no, eso sería un completo disparate. Yo, el síntoma, simplemente intento hablarte en un lenguaje que comprendas. Que entiendas.

A ver, dime algo: ¿Tú irías a negociar con terroristas, tocando a su puerta con una flor en la mano y una camiseta con el símbolo de “paz” impreso en la espalda? ¿No verdad?

Entonces, por qué no comprendes que yo, el síntoma, no puedo ser “sutil” y “suavecito” cuando debo darte el mensaje… Me golpeas, me odias, con todo el mundo te quejas de mi, de mi presencia en tu cuerpo, pero no te tomas ni un segundo en razonar y tratar de comprender el motivo de mi presencia en tu cuerpo.

Sólo te escucho decirme: “Cállate”, “vete”, “te odio”, “maldita la hora en que apareciste”, y mil frases que me hacen impotente para hacerte comprender. Pero yo debo mantenerme firme y constante, porque debo hacerte entender el mensaje.

¿Qué haces tú? Me mandas a dormir con medicinas. Me mandas callar con tranquilizantes, me suplicas desaparecer con antiinflamatorios, me quieres borrar con quimioterapias. Intentas día a día, taparme, sellarme, callarme. Y me sorprende ver que a veces, hasta prefieres consultar brujas y adivinos para que de forma “mágica” yo me vaya de tu cuerpo.

Y yo, cuando mi única intención es darte un mensaje, soy totalmente ignorado.

Imagínate que soy esa alarma con sirena en el Titanic, esa que intenta de mil formas decirte que de frente hay un Iceberg con el que vas chocar y hundirte. Sueno y sueno por horas, por días, por semanas, por meses, por años, intentando salvar tu vida, y tú te quejas porque no te dejo dormir, porque no te dejo caminar, porque no te dejo trabajar, pero sigues sin escucharme…

¿Vas comprendiendo??
Para ti, yo el síntoma, soy “La Enfermedad”.
Qué cosa más absurda. No confundas las cosas.
Y vas al médico, y pagas por docenas de consultas médicas.
Gastas dinero que no tienes en medicamento tras medicamento. Y sólo para callarme.
*Yo no soy la enfermedad, soy el síntoma.
¿Por qué me callas, cuando soy la única alarma que está intentando salvarte?

La enfermedad “eres tú“, “es tu estilo de vida“, “son tus emociones contenidas“, eso sí es la enfermedad. Y ningún médico aquí en el planeta tierra, sabe cómo combatir enfermedades. Lo único que hacen es combatirme, combatir el síntoma. Callarme, silenciarme, desaparecerme. Ponerme un maquillaje invisible para que tú no me veas.

Y sí, está bien si ahora que lees esto, te sientes un poco molesto sí. Esto debe ser algo como “un golpazo a tu inteligencia”. Está bien si por ahora te sientes un poco molesto o frustrado. Pero yo puedo manejar tus procesos bastante bien y los entiendo. De hecho, es parte de mi trabajo, no te preocupes. La buena noticia es que depende de ti no necesitarme más. Depende totalmente de ti, analizar lo que trato de decirte, lo que trato de prevenir.

Cuando yo, “el síntoma”, aparezco en tu vida, no es para saludarte, no. Es para avisarte que una emoción que contuviste dentro de tu cuerpo, debe ser analizada y resuelta para no enfermarte. Deberías darte la oportunidad de preguntarte a ti mismo: ¿por qué apareció este síntoma en mi vida?, ¿qué querrá decirme? ¿Por qué está apareciendo este síntoma ahora?. ¿Qué debo cambiar en mí para ya no necesitar de este síntoma?

Si dejas este trabajo de investigación, sólo a tu mente, la respuesta no te llevará más allá de lo que has hecho años atrás. Debes consultar también con tu inconsciente, con tu corazón, con tus emociones.

Por favor, cuando yo aparezca en tu cuerpo, antes de correr al doctor para que me duerma, analiza lo que trato de decirte, de verdad que por una vez en la vida, me gustaría ser reconocido por mi trabajo, por mi excelente trabajo. Y entre más rápido hagas conciencia del porqué de mi aparición en tu cuerpo, más rápido me iré.

Poco a poco descubrirás, que entre mejor investigador seas, menos veces vendré a visitarte. Y te aseguro que llegará el día en que no me vuelvas a ver ni a sentir. Al mismo tiempo que logres ese equilibrio y perfección como “analizador” de tu vida, tus emociones, tus reacciones, tu coherencia, te garantizo que jamás volverás a consultar a un médico ni a comprar medicinas.

¡Por favor, haz conciencia, reflexiona y actúa!

Entre más pronto lo hagas, más rápido me iré de tu vida!

Atte. "Tu síntoma"   - Adriana Schnake


  
En Ti está Todo 💙💛💖
Espiritualidad y Consciencia

miércoles, 22 de enero de 2020

Formación en Numerología Transpersonal

Con mucha alegría, en el año 2019, dicté  la Formación en Numerología Transpersonal. Ocho meses de intenso trabajo personal, .... tiempo de autoconocimiento profundo...

¡¡Felicitaciones a los alumnos que cursaron y aprobaron todas las instancias de la Formación!! Gracias por todos los momentos compartidos!! ¡Exitos!! 


En Ti está Todo 💙💛💗 
Espiritualidad y Consciencia